El Ayurveda nos llega de la India, es probablemente el sistema curativo más antiguo del mundo, con más de 5000 años de antigüedad, donde el cuerpo, la mente y el espíritu de cada individuo tienen la misma importancia. Literalmente significa "la ciencia de la vida". No está concebido sólo como un sistema médico, sino como una forma de vivir para promocionar la salud. Sus principios son fáciles de aplicar, se llevan a cabo con prácticas y rutinas en el día a día de cada individuo.
En la India existen más de 140 Facultades de Medicina donde se debe estudiar durante más de cinco años para obtener el título de médico.
Según el Ayurveda, el organismo humano está compuesto de tres principios metabólicos fundamentales denominados “doshas”: Vata, Pitta y Khapa. Estos tres elementos rigen todas las funciones de la mente, el cuerpo y la conciencia de cada individuo y cada una se corresponde con un elemento básico: Pitta – fuego, Vata - aire y Khapa - agua.
Nacemos con una proporción determinada de cada dosha, lo que hace que cada individuo tenga un funcionamiento físico y mental diferente. Muchas de nuestras enfermedades son causadas por un desequilibrio en nuestro dosha principal. Si conocemos nuestro tipo de dosha y seguimos algunas pautas, podemos equilibrar nuestro organismo.
El Ayurveda considera que lo principal para el tratamiento y la prevención de enfermedades, es promover el equilibrio mental, reducir el estrés y buscar la perfecta armonía con la naturaleza. Para conseguir este equilibrio ofrecen pautas relacionadas con la alimentación, el sueño, la sexualidad, los cambios estacionales, la actividad física, la armonía mental etc,. Emplea recursos que están dentro de cada persona y que desconocemos o solemos desatender, con el fin de despertar la “inteligencia biológica” del organismo.
Entre sus principales tratamientos está la desintoxicación del organismo, a través de una técnica denominada Panchakarma.
El recetario Ayurveda se basa en elementos naturales como hierbas y otros remedios menos familares en occidente, por ejemplo, el uso de gemas, metales y colores por sus propiedades curativas. Los textos clásicos ayurvédicos establecen que todos las sustuancias que se encuentran en la naturaleza tienen valor medicinal cuando se usan de una manera adecuada. El propósito no es suprimir los efectos de la enfermedad, como generalmente sucede en la medicina occidental, sino tratar de armonizar nuevamente los factores desequilibrados del cuerpo, para eliminar la causa. Incluye más 5000 formulaciones que pueden usarse en conjunto con medicamentos alopáticos. La OMS ha manifestado que los remedios ayurvédicos no necesitan ser sometidos a pruebas de toxicidad, o estudios clínicos de laboratorio para ser aprobados como medicamentos, porque ya ha sido demostrada su utilidad y seguridad en su uso continuado a lo largo de más de 5000 años.
El Ayurveda es efectivo en la prevención y la cura de enfermedades, la preservación de la salud y la búsqueda de la longevidad.
En la India existen más de 140 Facultades de Medicina donde se debe estudiar durante más de cinco años para obtener el título de médico.
Según el Ayurveda, el organismo humano está compuesto de tres principios metabólicos fundamentales denominados “doshas”: Vata, Pitta y Khapa. Estos tres elementos rigen todas las funciones de la mente, el cuerpo y la conciencia de cada individuo y cada una se corresponde con un elemento básico: Pitta – fuego, Vata - aire y Khapa - agua.
Nacemos con una proporción determinada de cada dosha, lo que hace que cada individuo tenga un funcionamiento físico y mental diferente. Muchas de nuestras enfermedades son causadas por un desequilibrio en nuestro dosha principal. Si conocemos nuestro tipo de dosha y seguimos algunas pautas, podemos equilibrar nuestro organismo.
El Ayurveda considera que lo principal para el tratamiento y la prevención de enfermedades, es promover el equilibrio mental, reducir el estrés y buscar la perfecta armonía con la naturaleza. Para conseguir este equilibrio ofrecen pautas relacionadas con la alimentación, el sueño, la sexualidad, los cambios estacionales, la actividad física, la armonía mental etc,. Emplea recursos que están dentro de cada persona y que desconocemos o solemos desatender, con el fin de despertar la “inteligencia biológica” del organismo.
Entre sus principales tratamientos está la desintoxicación del organismo, a través de una técnica denominada Panchakarma.
El recetario Ayurveda se basa en elementos naturales como hierbas y otros remedios menos familares en occidente, por ejemplo, el uso de gemas, metales y colores por sus propiedades curativas. Los textos clásicos ayurvédicos establecen que todos las sustuancias que se encuentran en la naturaleza tienen valor medicinal cuando se usan de una manera adecuada. El propósito no es suprimir los efectos de la enfermedad, como generalmente sucede en la medicina occidental, sino tratar de armonizar nuevamente los factores desequilibrados del cuerpo, para eliminar la causa. Incluye más 5000 formulaciones que pueden usarse en conjunto con medicamentos alopáticos. La OMS ha manifestado que los remedios ayurvédicos no necesitan ser sometidos a pruebas de toxicidad, o estudios clínicos de laboratorio para ser aprobados como medicamentos, porque ya ha sido demostrada su utilidad y seguridad en su uso continuado a lo largo de más de 5000 años.
El Ayurveda es efectivo en la prevención y la cura de enfermedades, la preservación de la salud y la búsqueda de la longevidad.
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